Cuando las tropas nazis se encontraban a escasos kilómetros de conquistar Moscú, el camarada Stalin ordenó celebrar el desfile aniversario de la Gran Revolución de Octubre como si nada extraordinario estuviera ocurriendo. Miles de soldados venidos de toda la Unión desfilaron frente al Kremlin alzando la gloriosa bandera roja del proletariado y jurando al partido que convertirían las cercanías de Moscú en tumba de los invasores alemanes. Las tropas fascistas se encontraban más cerca de Moscú que las tropas del mismísimo Napoleón. Millares de mujeres y estudiantes fueron movilizados para construir las defensas de la ciudad, los carros de combate T-34 salían sin pintar de la fábrica directos al campo de batalla, la situación era dramática.
Aquel 7 de noviembre de 1941 el camarada Stalin pronunció, frente a las heroicas tropas, parte del discurso que a continuación reproduzco:
“Todo el mundo ve en nosotros la fuerza capaz de aniquilar a las rapaces en vosotros… a sus libertadores. (…) ¡Que os inspire la victoriosa bandera del gran Lenin!... ¡Bajo la bandera de Lenin, adelante, hacia la victoria!
Los ¡hurras! de multitud de voces, el paso rítmico de los regimientos y el rugido de los motores se fundían en un grandioso fragor. Todo el país, con emoción y alegría, presintió en él el anuncio de una victoria no lejana.
Finalizado el desfile las tropas se dirigieron sin pausa al frente, para evitar que la catástrofe se cerniera sobre la capital del primer estado socialista del mundo.
El día del aniversario de la Revolución de Octubre (7 de Noviembre), en el gran desfile militar que se celebra, los Españoles de la cuarta compañía participan en el y juran la bandera Roja.
ResponderEliminarLos españoles cantan por las calles de la capital soviética:
Si me quieres escribir
ya sabes mi paradero
en el Frente de Moscú
primera línea de fuego.
Rodric Braithwait. embajador inglés en moscú escribió un libro que se llama "Moscú 1941" en editorial Crítica. Ahí relata este desfile y dice que a todos los que entrevistó recuerdan,con lágrimas en los ojos y una emoción indicriptible aquel desfile
ResponderEliminar